Hace unos días se pusieron en
contacto desde la empresa por si queríamos participar en un concurso de recetas
elaboradas con sus caramelos, en principio no pensábamos hacerlo pero después
de pensarlo mucho nos decidimos y les dijimos que sí. La verdad es que hacía ya
un par de semanas que nos habían enviado una estupenda caja con un surtido de
los famosos caramelos y no habíamos tenido tiempo de pensar en nada.
El jueves por la mañana se me
presentó la ocasión de dedicar un rato al tema y después de darle muchas
vueltas me decidí a hacer una prueba con ellos, no quería hacer nada muy
complicado porque las cosas que más suelen gustar son las más sencillas y entre
las tartas las de galletas tienen mucho éxito. Los caramelos Werther’s están
deliciosos y estaba casi segura de que combinándolos con galletas iban a estar
aún más buenos.
He preparado en muchas ocasiones
salsa de toffee, rellenos de tarta con toffee casero, pero el sabor que le dan
los caramelos a esta tarta es una autentica delicia, el sabor es fabuloso,
sinceramente no pensaba que fuese a quedar tan rica y además os aseguro que no
es difícil de hacer.
Para la tarta he usado dos tipos
de caramelos los classic cream Candies y los soft cream Toffees, ahora os
explico en qué he usado cada uno de ellos.
Relleno de la tarta:
1 bolsa de Werther’s Original
Classic cream Candies
600 ml de nata liquida 35%
materia grasa
200 ml de leche
1 sobre de cuajada
1 hoja de gelatina
2 cucharadas soperas de azúcar
Base y parte superior de la
tarta:
Galletas rectangulares
Un vaso de leche
1 copa de ron
100 gramos de chocolate para
postres (tipo Nestlé postres o similar)
Decoración de la tarta:
200 ml de nata para montar
8 caramelos Werther’s Original
soft cream Toffees
Un par de caramelos más para la
decoración final
Una cucharada de azúcar glas
Una cucharadita de estabilizante
para nata o bien una cucharada sopera de leche en polvo.
Vamos a empezar con la tarta, que
se tarda más en explicarlo que en hacerlo.
Primero necesitamos un molde
cuadrado o rectangular, yo he usado uno cuadrado con la base desmontable,
forramos el molde con papel de horno porque de esta forma una vez frio el
pastel es mucho más fácil desmoldar.
Una vez que tengamos el molde
bien forrado vamos mojando las galletas en la leche fría con el ron, solo un
poco porque si las mojamos demasiado se deshacen, las vamos colocando en el
molde, en el mío 12 galletas 3 x 4, ponemos otra capa de galletas encima (se
podría poner otra más, eso a gusto de cada uno) esta capa de galletas será la
parte superior de la tarta.
Dejamos en la nevera mientras
preparamos el relleno de la tarta.
Ponemos la hoja de gelatina a
remojar en agua fría. En un cuenco limpio y seco pondremos el sobre de cuajada
y las dos cucharadas de azúcar, mezclamos y reservamos junto con 200 ml de
nata.
En un cazo pondremos a hervir el
resto de nata junto con la leche y los caramelos, vamos dando vueltas hasta que
se derritan, en caso de que os cueste que se derritan hay un truco que no falla: ponemos en un cuenco de cristal los
caramelos a medio derretir junto con un poco de nata y los llevamos al micro un
minuto a media potencia, sacamos y mezclamos bien. Llevamos los caramelos
derretidos de nuevo al cazo de la nata y dejamos que se termine de mezclar
todo.
Mezclamos la nata reservada con
la cuajada con azúcar, movemos bien para que no queden grumos y lo echamos en
el cazo, dejamos hervir sin dejar de remover, una vez que hierva apartamos un
minuto del fuego y luego lo volvemos a poner hasta que vuelva a hervir,
escurrimos la hoja de gelatina y la añadimos a la crema, dejamos que la crema
de relleno se enfríe un poco sin dejar de remover porque se forma costra.
Sacamos el molde de la nevera y
con cuidado vamos poniendo nuestra crema, dejamos que solidifique un poco antes
de poner la base de la tarta.
Una vez que veamos que la tarta
empieza a estar fría colocamos las galletas que servirán de base a la tarta, al
igual que las primeras las vamos remojando en la leche y las colocamos
ordenadamente sobre la crema, hacemos tres capas de galletas. Tapamos la tarta
con film y dejamos en la nevera un mínimo de 5-6 horas.
Mientras tanto aprovechamos para
hacer la ganaché de Soft Cream ¨Toffees Werther’s Orginal, para ello ponemos a
calentar en un cazo la nata, en un bol pequeño pondremos los 8 caramelos y un
par de cucharadas de nata, los llevamos al micro para que se fundan un minuto a
baja potencia, los mezclamos con la nata caliente y en caso necesario dejamos
cocer para que se terminen de fundir. Reservamos en la nevera una vez que se enfrié,
tiene que estar bien fría antes de montarla.
Transcurrido el tiempo de reposo
sacamos de la nevera, fundimos el chocolate en el micro a baja potencia
(cuidado que se quema con rapidez) y lo extendemos por encima de las galletas,
dejamos que se solidifique antes de dar la vuelta a la tarta.
Damos la vuelta a la tarta sobre
el plato de servir, quitamos el papel con cuidado y procedemos a montar la
ganaché, añadimos la cucharada de azúcar glas y el estabilizante o la leche en
polvo (el que no tenga ninguna de estas cosas que no se preocupe, la ganaché
montará igual pero aguantará menos tiempo), montamos con las varillas hasta que
veamos que tiene la consistencia suficiente para decorar con la manga
pastelera.
Decoramos la parte superior de la
tarta con la ganaché de toffees, terminamos la decoración con los caramelos que
habíamos reservado.
Ahora ya solo queda disfrutar de
ella, no os asustéis por tanta explicación, ya veréis que es más fácil hacerla
que explicarla