El otro día viendo un programa de Jamie Oliver vi que hacia unas pechugas de pollo de una forma un poco peculiar, lo cierto es que no recuerdo muy bien el relleno que el ponía, pero de ahí saque la idea de estas pechugas.
Mi suegra era de Almería y allí
se han secado toda la vida los tomates y los pimientos, estos últimos de una
manera peculiar, en La Rambla de Oria hay un tipo de pimientos con una piel muy
gruesa y una carne estupenda que se asan y luego se secan ya asados y pelados
pero con su rabo, luego fritos con un huevo están de vicio. Hoy día los tomates
secos están muy de moda, se pueden encontrar en cualquier supermercado tanto
secos como rehidratados y conservados en aceite con distintos tipos de hierbas,
he contado todo esto porque el relleno está compuesto de espinacas y tomates
secos.
Para hacer esta receta
necesitamos:
Dos pechugas de pollo sin hueso
pero con piel y ala, grandes
1 manojo de espinacas
1 cucharada de piñones
8 tomates secos
4 hojas de salvia o albahaca
4 cucharadas de aceite de oliva
virgen extra
Perejil
Sal, pimienta.
Abrir las pechugas formando un
pequeño libro, reservar. Limpiar las espinacas, cortarlas en trozos pequeños,
escurrir bien y pasarlas por la sartén con una cucharada de aceite hasta que
pierdan toda el agua.
Poner los tomates en agua y
hidratarlos un par de minutos en el microondas (lo mejor es dejarlos en
remojo en agua tibia unas horas antes), una vez hidratados los cortamos en
trocitos, reservando enteras 4 mitades.
Lavar la salvia y el perejil,
cortarlo todo bien fino. En un cuenco pondremos las espinacas, la salvia y el
perejil, los piñones y los tomates cortados, ponemos un poco de sal, pimienta y
dos cucharadas de aceite, mezclamos bien. Rellenamos las pechugas con esta
farsa, volvemos a cerrar las pechugas de manera que no se salga el relleno, salpimentamos
por fuera.
En una sartén con tapa pondremos
una cucharada de aceite a calentar, doramos bien las pechugas a fuego lento
tapadas para que de esta forma se cocinen por dentro y no queden secas, a media
cocción añadimos los tomates secos reservados, las pechugas irán soltando jugo
pero si vemos que están demasiado secas podemos añadir un poco de caldo o de
agua para que al final nos quede un poco de salsita.
Ficaram fantásticas,com uma cor linda e um aspecto delicioso.
ResponderEliminarJá almoçava novamente
bj
umh... que pintaza! me encanta. Yo incluso le pondría queso pero ya como lo veo me pierde.. un besito! Recetas de una gatita enamorada
ResponderEliminarUnas pechugas para ponerse como Popeye .Quizás los peques así tomen las espinacas.Saludos
ResponderEliminarUna receta maravillosa, me encantan los ingredeintes, besos
ResponderEliminarQué ricas!! Te han quedado estupendas :)
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