REDONDO DE PAVO CON CIRUELAS, PASAS Y NUECES

Casi siempre comemos la pechuga de pavo a la plancha o bien rebozada, pero esta vez quería hacerla un poco más elaborada. Reconozco que este tipo de elaboraciones llevan bastante tiempo de cocina, pero el resultado es estupendo y además así nos salimos un poco de lo normal.

Para esta receta se macera la carne con vino de oporto (o bien o Pedro Ximenez) y zumo de naranja, otro día haré el pollo de esta forma porque creo que saldrá bien sabroso.

Para esta receta vamos a necesitar:

700 gramos de pechuga de pollo fileteada

8 nueces

1 cebolla grande

50 gramos de pasas

100 gramos de ciruelas pasas sin hueso

1 vaso de vino de Oporto

El zumo de una naranja

Sal, pimienta

Aceite de oliva virgen extra.

Limpiamos la cebolla y la hacemos trocitos pequeños, la pochamos en una sartén con un poco de aceite hasta que empiece a tomar color, apartamos la mitad para poner en el relleno y el resto lo reservamos.

Salpimentamos la carne y la ponemos a macerar un par de horas en el vino y el zumo de la naranja, al mismo tiempo pondremos también las pasas y las ciruelas a macerar. Pasadas las dos horas (también se pueden poner la noche anterior) escurrimos bien las pechugas y las extendemos sobre dos trozos de papel film, reservando 4 trozos aproximadamente. Tenemos que hacer dos rulos con ellas.

Picamos los trozos reservados con las ciruelas, las pasas y las nueces, extendemos esta pasta encima de las pechugas y sobre ella la mitad de la cebolla que teníamos para el relleno, procedemos a enrollar las dos pechugas, liamos bien con papel film que pueda ir al micro, lo atamos y ponemos los dos rollos de pechuga en el micro unos 6 minutos, pasado este tiempo los dejamos enfriar un poquito para poder manejarlos, atamos los rollos para que no se desmonten y los doramos en el mismo aceite que habíamos pochado la cebolla, una vez dorados los sacamos y reservamos.

En ese mismo aceite pondremos el jugo de la maceración y la cebolla reservada, dejamos un par de minutos que se reduzca y añadimos los redondos, tapamos y dejamos cocinar unos 10 minutos dando la vuelta de cuando en cuando para que se haga por todos lados.

Quitamos los hilos, cortamos y servimos con un poco de salsa.

TARTA FONDANT SUPERHEROES

Esta es nuestra última tarta de fondant se la hicimos a Alvaro por su cuarto cumpleaños, su mama nos dijo que  quería una tarta con el tema de superhéroes,  Batman, superman y spiderman… Por dentro era de bizcocho de chocolate con relleno de fresa y el primero pise de bizcocho de fresa con pepitas de chocolate y  relleno de fresa.

CREMA DE APIO AL QUESO AZUL

Hace unos días ya subí una crema de apio que es una autentica delicia, a los de casa les gusto mucho, bueno más que mucho muchísimo, creo que es una crema que merece mucho la pena hacer porque os va a sorprender. Unos días después hojeando unas revistas me encontré con esta versión de la crema de apio con un poco de queso azul, como las dos cosas nos gustan en casa he hecho la prueba, y la verdad es que también está muy rica, aunque yo (y toda la familia) pensamos que la otra nos gusta más, quizá porque el sabor es más suave, el queso azul mata mucho el sabor al apio.

Esta versión me parece ideal para hacerla como entrante en una comida familiar, eso sí decorada con un poco de queso azul, a mi no me quedó ni un trocito para la decoración.

Vamos a necesitar para hacerla:

1 apio de los que venden limpios (pesan 500 gramos)

1 cebolla grande o dos pequeñas

1 patata mediana

1 litro de caldo de ave

150 gramos de queso azul (y un poco para decorar)

4 cucharadas soperas de aceite

1 brick de nata para cocinar

Sal, pimienta.

Pelamos la cebolla y la trocemos, ponemos el aceite en una olla a calentar, pochamos en él la cebolla con un poco de sal, cuando empiece a estar un poco hecha añadimos el apio previamente lavado y troceado, dejamos unos 10 minutos, agregamos la patata pelada y cortada en trozos pequeños, salpimentamos. Cubrimos con el caldo de ave y dejamos cocer hasta que esté toda la verdura bien tierna.

Una vez que la verdura esté lista trituramos la crema y la pasamos por un colador para quitar los restos de hebras del apio.

Trituramos el queso con la nata liquida, agregamos todo a la crema y la calentamos procurando que no llegue a hervir, servir caliente la crema con unos trocitos de queso azul para decorar o bien unos trocitos de pan frito.

EGIPCIOS

Hoy os traemos otra receta del libro dulce lo vivas la repostería sefardí, son unas pastas pequeñitas con un relleno de dátiles y agua de azahar ideales para tomar con el café.

Ingredientes:

150 gr Mantequilla o margarina

350 gr Harina

1 Cucharada de agua de azahar

50 ml Aceite de girasol

1 Cucharada de azúcar

1 Pizca de sal

Azúcar glas para decorar

Ingredientes para el relleno:

250 gr Dátiles picados

2 Cucharadas de azúcar

1 Cucharada de agua de azahar

1 Cucharadita de canela en polvo

1 pizca de clavo molido

1 Cucharada de mantequilla

Proceso de elaboración:

Mezclar en un cuenco todos los ingredientes del relleno y reservar, yo los puse todo en la picadora y lo pique hasta hacer una masa.

Trabajar la mantequilla o margarina con el agua de azahar, el azúcar y la sal hasta que este suave.

Añadir la harina poco a poco hasta conseguir una masa blanda pero no pegajosa, dejar reposar durante 15 minutos.

Dividir la masa en porciones de 15 gramos y hacer bolitas con ella poner un trozo del relleno dentro y  darle forma de croqueta.

Hornear durante 9 minutos a 180ºC, no dejar que se doren.

Dejar que se enfríen y espolvorear con azúcar glas.

CALDERETA DE TERNERA Y VERDURAS

Esta receta está sacada de una revistilla que tenia por casa y que se llama cocina tradicional, reconozco que me entro por la vista nada más verla, lo cierto es que el resultado ha sido fantástico, nos ha gustado mucho. Para la próxima vez tengo que hacer menos el brócoli y ponerlo  al final directamente en los platos para que no se rompa, por lo demás es un plato excelente, bien completo, con muchas verduras y un sabor fabuloso.

Por supuesto como siempre admite variaciones, al que no le guste el brócoli que no lo ponga, o bien si os gusta alguna otra verdura se la podéis poner. Cuando llegue la temporada de setas se pueden incorporar también al guiso. Para este guiso se usan hierbas provenzales, pero como no me quedaban las he sustituido por romero, tomillo, ajedrea y un poco de salvia, todas ellas del jardín.

Bien vamos a ver lo que necesitamos para esta receta:

1 kilo de ternera cortada en dados

2 zanahorias grandes

400 gramos de cebollitas francesas

250 gramos de champiñones

1 brócoli

1 tomate grande (pero bien grande) o dos medianos rallados

1 litro de caldo de ave o de carne

1 vaso de vino blanco

Aceite de oliva

1 cucharada de hierbas provenzales o bien un poco de tomillo, romero, ajedrea, salvia

1 cucharadita de pimienta en grano

1 cucharada de maicena

Sal.

Limpiar el brócoli y hacerlo ramitos, cocer al vapor con un poco de sal hasta que esté hecho pero sin pasarnos porque luego se deshace.

Limpiar las cebollitas, limpiar las zanahorias y hacerlas trozos medianos, limpiar los champiñones y partirlos por la mitad.

En una cazuela poner ½ taza de aceite a calentar, rehogar en ella las cebollas y las zanahorias hasta que empiecen a tomar color dorado, reservar. Hacer lo mismo con los champiñones. Una vez que tengamos las verduras salteadas, pondremos la carne previamente salpimentada, y la dejamos dorar a fuego fuerte, cuando esté lista añadimos el tomate rallado, la pimienta en grano y las hierbas provenzales, dejamos que se haga bien el tomate (lo sabremos cuando se vuelva  a ver el aceite) en este punto pondremos el vino blanco que dejarnos reducir  a la mitad, cuando lo tengamos reducido agregaremos el caldo, y las verduras, tapamos la cazuela y dejamos cocer a fuego lento hasta que la carne esté bien tierna, en caso necesario añadir más caldo.

Para espesar un poco la salsa pondremos media taza de café de agua y desleímos en ella la maicena, la agregamos al guiso para que nos quede una salsa bien espesita. En el momento de servir añadimos el brócoli, yo lo puse antes y al ser tan tierno se rompió todo.

Para completar el guiso podemos servirlo acompañado de unas patatas fritas, aunque al tener tanta verdura casi no es necesario.

MUFFINS DE NUTELLA, LOS DEFINITIVOS

¿Os gusta más la Nocilla o la Nutella? Yo debo reconocer que no noto la diferencia, será porque no soy nada amante de esta crema de chocolate y avellanas. Durante muchos años he comprado Nocilla y hace un tiempo empecé a comprar Nutella y ahora ya nadie quiere en casa la Nocilla.

¿Muchos os preguntareis por qué hago unos muffins de Nutella si no me gusta? Bien, los he preparado porque a mi hijo y sus amigos les encanta y sabía que estos les iban a gustar mucho. Me han gustado hasta a mí, lo cierto es que estaban deliciosos y la única complicación que tienen es picar las avellanas, no hay excusa para no hacerlos, son tan fáciles que incluso los pueden preparar los niños, siempre que les piquemos las avellanas y sean mayores de 6 años, porque dicen los pediatras que es mejor que no coman frutos secos antes.

Una idea interesante es dejar pesados los ingredientes la noche anterior, por ejemplo un sábado, y a la mañana siguiente solo tenemos que mezclar y hornear  para tener un desayuno especial cuando se levanten los niños y los no tan niños.

El que no tenga Nutella que use Nocilla.

Vamos a necesitar:

300 gramos de harina

110 gramos de azúcar

1 cucharadita de levadura tipo royal

1 pizca de sal

250 ml de leche entera

2 huevos grandes o 3 medianos

85 gramos de mantequilla sin sal derretida

200 gramos de Nutella

60 gramos de avellanas

12 trocitos de chocolate con leche o pepitas de chocolate

12 capsulas para Muffins

Para poner por encima necesitamos:

45 gramos de azúcar

30 gramos de avellanas.

Lo primero que tenemos que hacer es poner el horno a calentar a 170ºC con calor por arriba y por abajo.

Trituramos las avellanas junto con el azúcar, ponemos la harina, la levadura, la sal, y las avellanas trituradas con el azúcar en un bol grande y lo mezclamos bien.

En otro tazón pondremos los huevos, la leche, la mantequilla derretida y la Nutella y con una varilla batimos hasta que esté todo mezclado.

Combinamos los ingredientes secos con los húmedos lo justo para que se integren pero sin batir la mezcla.

Ponemos una pequeña cantidad en cada una de las 12 capsulas para muffin, luego colocamos el trocito de chocolate con leche o unas pocas pepitas de chocolate, cubrimos con más masa, repartiéndola de forma uniforme entre los 12.

Trituramos las avellanas con el azúcar que teníamos reservado para cubrir, lo repartimos por encima de los muffins y horneamos unos 30-35 minutos hasta que al pinchar salga seco.

CROQUETAS DE POLLO CON ESPINACAS Y NUECES “EL NO VA MÁS DE LAS CROQUETAS”

Me encanta hacer croquetas, al principio siempre las hacía con los restos de carne del cocido, pero con el paso del tiempo las he ido haciendo de muchas cosas diferentes, las de boletus son una de las recetas más visitadas del blog, las de jamón las preferidas de mi marido, a mi me gustan mucho las de gambas (que por cierto tengo que hacerlas otro día porque no están en el blog).

Lo cierto es que nos dan mucho juego porque podemos hacerlas de tantas cosas, además también podemos jugar con el tamaño y la forma. Si son para una comida o una cena las podemos hacer en la forma tradicional, si son para un aperitivo o una comida-cena informal las podríamos hacer más pequeñas, tanto en la forma tradicional como en bolas.

Siempre me gusta tener algunas congeladas para imprevistos, porque las que venden congeladas en esta casa tienen muy mala acogida.

Ahora me he propuesto hacer nuevas recetas con mezclas de ingredientes que contrasten y que aporten nuevos sabores. Hace unos días encontré en el blog Recetas para enamorar unas “Croquetas de pollo y espinacas de escandalo” al ver el titulo me fui corriendo a verlas y la idea me pareció genial, las mías están basadas en esas, podéis ver las originales pinchando el enlace, yo las he hecho mías modificando algunas cosas, tanto en cantidades como en la forma de hacerlas, muchas gracias Reyes por compartirlas.

Con las cantidades que os pongo me salieron aproximadamente 19-20 croquetas de buen tamaño, si queréis hacer más solo poner el doble y así os quedaran para congelar, pero hacerlo antes de que las prueben o no os dejaran congelarlas. Son unas de las croquetas más ricas que he probado en mucho tiempo.

Para hacerlas necesitamos:

1 pechuga de pollo (grandecita, pero solo la de medio pollo)

1 cebolla mediana

8-10 nueces

2 cucharadas de parmesano rallado

1 manojo de espinacas (no suelo usar congeladas así que no se deciros que cantidad, calculo que unos 150-200 gramos)

1 cucharada de mantequilla

3 cucharadas de aceite

3 cucharadas soperas de harina (colmadas)

½ litro de leche

Sal, pimienta, nuez moscada

Harina para rebozar

1 huevo batido

Pan rallado

Aceite suave para freír

Pondremos en una sartén la mantequilla junto con las 3 cucharadas de aceite a calentar, pelamos la cebolla y la troceamos bien pequeña, la ponemos a pochar con un poco de sal hasta que empiece a tomar color.

Mientras tanto limpiamos las nueces y las picamos en una picadora junto con la pechuga de pollo (nosotras lo hacemos en el accesorio picador de la kitchen aid), cuando la cebolla esta lista añadimos la pechuga y la dejamos que hasta que la carne esté hecha, añadimos un poco de sal, pimienta y la nuez moscada.

Una vez que tengamos la carne al punto añadimos las 3 cucharadas de harina y damos vueltas unos minutos hasta que la harina pierda el gusto a crudo, añadimos la leche y el parmesano y cocinamos dando vueltas hasta que se despegue de las paredes de la sartén.

Limpiamos las espinacas, las lavamos bien y las troceamos, centrifugamos las espinacas para quitarles toda el agua (con un centrifugador de verduras), en una sartén pondremos un par de cucharadas de harina y salteamos las espinacas con un poco de sal hasta que estén hechas y no suelten nada de agua.

Mezclamos las espinacas con la masa de las croquetas y dejamos enfriar tapadas con un film para que no se haga costra, una vez fría la masa formamos las croquetas a nuestro gusto, las pasamos por harina, luego por el huevo batido y por ultimo por pan rallado. Freímos en abundante aceite bien caliente hasta que estén doradas por todos lados. Podemos servir acompañadas de una buena ensalada de lechuga.

Disfrutar de estas fabulosas croquetas, según Reyes de “Escándalo”, realmente quedan espectaculares.

TARTA FONDANT ROSA PARA ALBA

Esta tarta es muy parecida a la que le hicimos a Eva para su bautizo (podéis verla aquí) solo que en tonos más rosas, en esta ocasión se la hicimos  a Alba para su sexto cumpleaños  y por dentro era de bizcocho de chocolate y relleno de chocolate blanco.

HUEVOS RELLENOS DE ATUN Y PALITOS DE CANGREJO MEGARAPIDOS

Hay veces que andamos algo pillados de tiempo para preparar recetas muy elaboradas, en estos casos hay que tirar de las conservas, siempre de buena calidad, para agilizar un poco el proceso.

Mi madre preparaba los huevos rellenos solo con atún y la yema de huevo, los colocaba con el relleno hacia abajo en una fuente llena de salsa de tomate casera, y luego los espolvoreaba con un par de yemas a trocitos. Partiendo de estos huevos rellenos yo he preparado una variante añadiendo más ingredientes y con una salsa de tomate de bote.

Yo suelo contar dos huevos por persona, de esta forma siempre me quedan algunos para los que les gusta repetir (lo normal es que cada uno se coma uno porque llenan bastante), si queréis que os sobren para otro día mejor poner alguno más.

Para hacerlos vamos a necesitar:

8-10 huevos

2 latas de atún en aceite de girasol o de oliva (siempre es mejor saber que aceite es, algunos indefinidos son perjudiciales para la salud)

6 palitos de cangrejo (surimi)

½ lata de olivas rellenas de anchoa

3 cucharadas de mayonesa

1 bote de tomate frito tipo casero (tanto el de la marca Día como el de Mercadona son buenos, pero el de la marca Hida es muy bueno)

Lo primero que haremos es cocer los huevos unos 10-12 minutos en agua con un poco de sal, una vez pasado este tiempo los enfriaremos rápidamente (lo mejor en agua con hielo).

Pelamos los huevos y los partimos por la mitad, quitamos las yemas, reservamos 3 trozos para la decoración.

Pasamos los palitos por la picadora y  luego los transferimos a un bol, hacemos lo mismo con las olivas.

Por último pasamos por la picadora el atún junto con las yemas de huevo, al atún le quitamos el exceso de aceite.

Mezclamos todo bien junto con las 3 cucharadas de mayonesa, rellenamos los huevos con esta mezcla.

Cubrimos el fondo de una fuente con el tomate frito y vamos colocando ordenadamente los huevos encima, yo los he puesto con el relleno hacia arriba, pero también se pueden poner con el relleno hacia abajo, por ultimo  rallamos las yemas que teníamos reservadas y las esparcimos sobre los huevos y listos para servir.

TARTA DE TRUFA Y CHANTILLY CON YEMA TOSTADA

El día 27 de agosto fue mi cumpleaños y en un principio no iba a tener una tarta pero al final hubo cambio de planes y mi madre  me hizo esta tarta corriendo esa misma mañana, yo la ayude un poquito al final pero desde aquí le doy las gracias, estaba muy rica.

Por dentro era de chantilly y trufa de chocolate, arriba una capa fina de yema quemada y por los lados chantilly.

Esta receta de trufa es la primera vez que la hacemos y la verdad que quedo muy bien, es del libro Arte y técnica de la pastelería de jaume sàbat y aumasque. 

Ingredientes:

2 Bizcochos de plancha  - Aquí

Chantilly  (igual que la natada montada pero anañiendo una cucharadita de extracto de vainilla) - Aquí

Trufa

Yema fina – Aquí

Jarabe de calar - Aquí

Ingredientes para la trufa:

1 l de nata

150 gr azúcar

180 gr cobertura de chocolate (en verano 200 gr)

Poner la nata en un cazo junto con el azúcar y la vainilla cuando empiece a hervir retirar del fuego y añadir el chocolate rayado y remover hasta que esté todo el chocolate fundido.

Poner la trufa en un bol y dejar en la nevera al menos 24 horas. Antes de usar batir con la batidora  hasta tener una textura como la nata montada.

Montaje de la tarta:

Con todos los ingredientes preparados, ponemos un bizcocho sobre una bandeja  y con ayuda de un pincel lo calamos con un almíbar tanto por tanto (la misma cantidad de agua que de azúcar todo junto a hervir en un cazo, se usa en frio) ponemos la nata chantilly  o la trufa en una manga pastelera con una boquilla lisa y escudillamos sobre la superficie del bizcocho.

Colocamos otra plancha de bizcocho encima y repetimos la operación con el otro relleno.

Extendemos la yema fina sobre la última capa con ayuda de una espátula, cubrimos con azúcar  y quemamos con ayuda de un soplete.

Poner la chantilly en una manga pastelera con boquilla rizada y escudillar tiras alrededor de la tarta.

Dejar en la nevera hasta servir.

SALADITOS DE HOJALDRE

Aunque sea usando hojaldre del que venden preparado, estos saladitos están infinitamente mejores que los que venden congelados y listos para hornear. Los que venden congelados llevan dentro una pasta con un ligero sabor, pero ni la textura es comparable. Además usando hojaldre del que venden preparado tampoco son tan difíciles de hacer, solo hay que dejar volar la imaginación, ver que tenemos en la nevera y en un ratito tendremos unos ricos hojaldres salados para deleitar a nuestros invitados.

En esta ocasión hemos usado hojaldre de Lidl, dos paquetes de los que hemos sacado seis clases diferentes de saladitos:

De dátiles y bacon

De jamón y queso

De morcilla con sésamo garrapiñado

De queso azul y bacon

De anchoas y aceitunas

De Atún y huevo cocido

Lo primero que tenemos que hacer es desenrollar el hojaldre, tomamos la medida del ancho y lo dividimos en tres partes, para que salga recto nos valemos de una regla o bien de una madera (nosotras usamos una madera que tenemos para las galletas), medimos en una parte del hojaldre y en la contraria y cortamos con un cuchillo bien afilado.

Batimos un huevo que usaremos tanto para pintar los hojaldres como para sellarlos, con una brocha de cocina pintamos un lado del hojaldre con huevo batido para que luego quede bien sellado.

Para los hojaldres de dátiles y bacon, cortamos el bacon en trocitos, quitamos los huesos a los dátiles y los troceamos, colocamos sobre el hojaldre. Con unas 3 lonchas de bacon y 6-8 datiles será suficiente, enrollamos el hojaldre de manera que quede bien sellado y pintamos con huevo, para que queden mas decorativos podemos ponerles un poco de sésamo.

Para los de jamón y queso pondremos un par de lonchas de jamón enrolladas y encima una tira de queso (nosotras usamos enmental, pero cada uno que use el que le guste, enrollamos y pintamos con huevo, podemos cubrir con un poco de queso tipo parmesano rallado.

Para los de morcilla pondremos la cantidad suficiente de morcilla, enrollamos el hojaldre y lo cubrimos con sésamo garrapiñado.

Para los de queso azul, picaremos un trocito no excesivamente grande de queso azul con un poco de enmental o gruyere, ponemos una loncha de bacon a trocitos sobre el hojaldre y sobre el bacon distribuimos la mezcla de queso, sellamos, pintamos con huevo y ponemos un poco de queso rallado (una almendra también quedaría bien).

Para los de anchoa distribuimos las anchoas sobre el hojaldre quitando el exceso de aceite, enrollamos, sellamos y pintamos con el huevo, colocamos media aceituna rellena encima.

Para los de atún cocemos un huevo hasta que esté duro y lo picamos con dos latitas pequeñas de atún, rellenamos el hojaldre, lo pintamos con huevo y lo cubrimos con unas aceitunas picadas (en nuestro caso mezcla de rellenas y negras.

Antes de introducir en el horno con un cuchillo afilado procedemos a cortar los hojaldres, solo hay que hacer el corte, no hace falta separarlos.

Introducimos en el horno previamente calentado a 205 ºC hasta que estén bien doraditos, pasamos a una rejilla para que se enfríen y luego a una fuente de servir.

TARTA FONDANT RAYO MCQUEEN III

Esta es la tercera tarta de rayo McQueen que hacemos y es que a los niños les encanta tanto que las dos primeras tartas una de ellas tuvieron que darle un juguete para que les dejara partirla y la otra creo que acabo en el congelador porque no dejo que nadie la tocara, esta vez el coche es mucho más grande que las otras veces, por dentro era un bizcocho de chocolate y relleno de chocolate blanco y esperamos que alexander si les dejara comerla y les gustara mucho.

TARTA DE ARROZ Y CALABACÍN

Yo no sé por qué me pasa siempre lo mismo, pero cuando preparo arroz blanco como acompañamiento siempre me sobra un montón, y claro no me gusta nada tirarlo. La opción de convertirlo en una ensalada de arroz ya me empieza a resultar cansada y he decidido explorar nuevas vías, esto unido a que ayer me regalaron unos calabacines con una pinta fabulosa y a que casualmente había visto en una revista una receta que se adaptaba a mis necesidades han dado como resultado una tarta o pastel como queráis llamarlo muy rico, este a su vez me ha abierto los ojos parar prepararlo en alguna ocasión más pero con variaciones que lo pueden hacer muy interesante.

Partiendo de la receta que había visto en la revista, he realizado unos cuantos cambios para adecuarla a lo que tenía en casa, ya que no quería comprar más cosas, en la receta original ponen rucula y como no suelo tener porque no les gusta demasiado la he sustituido por cebolla tierna y creo que el resultado ha sido fabuloso.

Desde luego si no le decís a nadie que es un aprovechamiento de restos no se van a enterar.

Para hacerla necesitaremos:

200 gramos de arroz blanco cocido (el mío tenía un poco de ajo frito)

4 huevos

2 calabacines pequeños

2 cebollas tiernas (cebolletas)

100 gramos de queso tipo emmental o gruyere

2 cucharadas de parmesano

½ tacita de café de aceite de oliva

1 cucharada de mantequilla + un poco para el molde

100 ml de nata liquida

Sal, pimienta, nuez moscada.

Lo primero que tenemos que hacer es pelar las cebollas y cortarlas en trozos pequeños, en la sartén con un poco de aceite y un poco de mantequilla las pondremos a pochar hasta que empiecen a tomar color. Escurrimos las cebollas con un colador y volvemos a poner el aceite en la sartén. Lavamos bien los calabacines, les quitamos las puntas y con un rallador los rallamos, los pochamos en la sartén a fuego alto hasta que pierdan toda el agua y empiecen a dorarse.

Rallamos el queso y lo reservamos. Batimos los huevos con un poco de sal, pimienta y nuez moscada, añadimos la nata y mezclamos bien todo el conjunto, pondremos el queso rallado, una cucharada de parmesano, la cebolla y el calabacín, mezclamos todo bien y vertemos la mezcla en un molde bajo previamente engrasado, espolvoreamos la otra cucharada de parmesano y llevamos al horno que tendremos previamente calentado a 180 con aire y calor por abajo unos 20-30 minutos, los últimos 10 minutos pondremos el aire y el gratinador, pinchar para ver si está bien cocida. Nos tiene que quedar un bonito color dorado por encima.

GALLETAS DE MAZAPAN Y PEPITAS DE CHOCOLATE

Hace unos días subí  unas galletas también de mazapán pero que llevaban chocolate blanco, esas galletas estaban deliciosas, y como quedó mazapán y había que aprovecharlo nos decidimos a hacer las otras galletas que había en la página de donde sacamos las primeras porque después del resultado tan bueno que dieron pensamos que no podían salir mal. Lo cierto es que así ha sido, estas también estaban deliciosas.

Por cierto aquí os dejo el enlace para que podáis ver el original, nosotras hicimos el doble de cantidad para terminar de aprovechar el mazapán.

Para hacerlas vais a necesitar:

112 gramos de margarina (1/2 taza)

70 gramos de azucar

75 gramos de mazapán picado

60 ml de leche (1/4 de taza)

1 cucharadita de pasta de vainilla

170 gramos de harina

25 gramos de almidón de maíz (maicena)

1 cucharadita de levadura tipo royal

100 gramos de pepitas de chocolate

1 pizca de sal

Precalentamos el horno a 160º C con calor por arriba y por abajo, preparamos unas bandejas con papel de horno.

Batimos la margarina con el azúcar un par de minutos hasta que esté esponjoso. Añadimos el mazapán, la leche y la vainilla, batimos hasta que esté todo bien mezclado. En otro bol tamizamos la harina, la maicena, la levadura y la sal, la agregamos a la mezcla de margarina y la batimos hasta que esté bien integrada, le incorporamos las pepitas de chocolate y hacemos bolas más o menos del  mismo tamaño que aplastamos un poco, cocemos unos  15 minutos hasta que empiecen a tomar color dorado, pasamos a una rejilla para que terminen de enfriarse.