NATILLAS A LA VAINILLA CON FRUTA SALTEADA

Hoy es el día de la Comunidad en Castilla y León, también es un día señalado en Cataluña  Sant Jordi (el día del libro y de la rosa). Yo no celebro este tipo de fiestas, quizá porque al haber vivido en varios sitios he perdido ese sentimiento patriótico que tienen los que lo celebran.

Soy murciana de nacimiento, bueno Cartagenera que luego se me enfada la gente, he vivido en Palma de Mallorca,  en Cartagena, en Cataluña (primero en Martorell y luego en Collbató) y ahora resido en Castilla y León, concretamente en la provincia de Salamanca, así que quién sabe dónde acabaré.  Lo cierto es que todos los sitios en los que he vivido me parecen fantásticos, todos tienen sitios preciosos, unas tradiciones  fabulosas, una rica gastronomía y unas gentes maravillosas. 

Me parece muy respetable la gente que quiere celebrar este tipo de cosas, siempre y cuando no nos lleven a los extremismos y a creernos mejores que otros. El sitio donde nacemos es circunstancial, lo que verdadera importa de un sitio es la gente, y en todos sitios a gente buena y gente mala. En los tiempos que corren deberíamos ocuparnos más de lo que nos une que de lo que nos separa.

Amo y respeto todos los sitios en los que he vivido, en todos he pasado momentos estupendos y otros muy dolorosos, pero en todos ellos he tenido a mi gente, y en todos me he sentido arropada por los amigos, aunque este lejos de algunos ellos saben que no los olvido.

Bueno, después del tostón que os he pegado os dejo una receta festiva, la podéis hacer para celebrar el día de la Comunidad o bien para celebrar simplemente que estáis con vuestra gente, está deliciosa y no es nada difícil.

Ingredientes:

Para las natillas: ½ litro de leche, ½ vaina de vainilla, 100 gramos de azucar, 20 gramos de maicena, 4 yemas de huevo.

½ piña, 1 pera grande, 2 plátanos, 1 cucharada de mantequilla, 100 gramos de azucar, 1 copa de ron, ½ vaina de vainilla, 1 anís estrellado, ½ limón.

Abrir la vainilla y sacar las semillas raspando con un cuchillo, poner la leche en un cazo, añadir las semillas de vainilla así como la vaina y llevar a ebullición a fuego lento. En un  bol grande pondremos las yemas, el azucar y la maicena, batimos todo bien y una vez que la leche esté bien caliente la añadimos poco a poco a la mezcla de yemas. Pasamos la mezcla colada a otro cazo y cocemos a fuego lento hasta que espese, dejamos enfriar removiendo de cuando en cuando para que no se forme costra (se puede acelerar el proceso poniendo el cazo en un bol con agua y cubitos de hielo).

Para preparar la fruta la pelaremos y la trocearemos, tanto a la pera como al plátano le daremos con un poco de zumo de limón para que no se pongan negros. En una sartén pondremos la mantequilla y cuando esté caliente añadimos las frutas, la vainilla (tanto las semillas como las vainas) y el anís estrellado,  salteamos hasta que se empiecen a dorar y en ese punto añadimos el azúcar  dejamos que se caramelice (al principio es mejor no mover, solo hacerlo cuando el azúcar empiece a tomar algo de color) ponemos el ron y flambeamos, cuando la llama se apague ya tenemos nuestra fruta lista, dejamos enfriar antes de montar el postre.

Para montar el postre pondremos en una copa chula las natillas que ya tendremos bien frías, repartir en las cuatro copas y por encima poner las frutas salteadas.

Cada uno que le ponga las frutas que más le gusten, a mi postre le ha faltado un poco de color, pero estaba exquisito.