CUERNOS DE GACELA

Por lo que he podido ver por la red y en los libros con los cuernos de gacela pasa como con infinidad de recetas que hay multitud de formas de prepáralas, según la región, según la familia, según la persona. Desde hace mucho tiempo tenía ganas de preparar esta receta, siempre la había visto como algo complicado y no me había atrevido. Entre otras cosas casi todas las recetas son con un relleno. Pero hace unos días en uno de los grupos de cocina de facebook al que estoy agregada conocí a una persona, nos estaba enseñando unos cortadores para pastas que ella compra en Argelia, al verlos le pregunté para qué era cada uno y resultó que uno de ellos era para los famosos cuernos de gacela, no dudé en preguntarle si tenía la receta y en un momento la busco y me la pasó en un privado.

Después de darme la receta estuvimos conversando un rato, conociéndonos un poco, por lo poco que sé de ella le hará mucha ilusión ver que he preparado los cuernos de gacela, la receta que ella me dio y que es la que hacen en “su casa”, realmente no sé si les he dado la forma correcta o tendría que ser de otra, espero que cuando Teresa pueda los haga para que yo y todos veamos la forma correcta y como dársela.

Me he olvidado de decir que los cuernos están muy buenos, según mi marido están mejor cuanto más los comes, van pasando los días (no muchos) y parece que los sabores se asientan y te gustan más. Estaba pensando en futuro hacerlos rellenos con dátiles y almendra ¿qué os parece la idea?

De momento aquí os dejo mi interpretación de los Cuernos de Gacela, un pequeño regalo para ella y para que todos la podáis disfrutar, al mismo tiempo os dejo esta frase del Facebook de Teresa que me ha gustado mucho.

"La mala noticia, es que el tiempo vuela. La buena, es que usted es el piloto"

(yo he preparado la mitad)

500 gramos de mantequilla, 250 gramos de azúcar, 1 sobre de vainilla (azúcar), 1 sobre de levadura química, 4 huevos, 4 yemas, la harina que admita y ajonjolí (sésamo) para poner por encima.

Poner la mantequilla junto con el azúcar y la vainilla y batir durante 10 minutos, añadir las yemas y batir hasta que se mezclen, luego añadir los huevos de uno en uno, no añadir el siguiente hasta que no esté integrado el anterior. Luego añadir la harina con la levadura, ir añadiendo harina hasta que quede una masa como para hacer rosquillas, que esté manejable, ni demasiado dura ni demasiado blanda.

Hacer porciones del mismo tamaño (unos 28-30 gramos) dar forma de media luna y rebozar con el ajonjolí, cocer en el horno previamente calentado a 180ºC durante unos 15 minutos aproximadamente hasta que empiecen a estar dorados.

Al sacarlos del horno dejar enfriar un par de minutos y espolvorear con azúcar glas.